Por Redacción Digital
CIUDAD DE MÉXICO., 15 de noviembre de 2019.,- Los datos que provienen de Curiosity, el rover que se encuentra en Marte, reveló nueva información sobre el oxígeno. Ya que, se comporta de una manera inexplicable. Esta investigación se publicó en el Journal of Geophysical Research: Planets.
Ya que, este robot no solo está explorando las rocas debajo de la superficie. Curiosity también hace lecturas de la atmósfera marciana para medir los cambios atmosféricos estacionales.
Ha estado allí durante tres años en Marte. Esto es equivalente a seis años en la Tierra.
Los científicos que analizan las mediciones notaron que el oxígeno en la atmósfera del planeta no se está comportando como se esperaba. En realidad no hay tanto oxígeno en Marte.
La mayor parte de su atmósfera, que es delgada, está compuesta por:
- 95% en volumen es dióxido de carbono.
- El resto está compuesto por 2.6% de nitrógeno molecular.
- 1.9% de argón.
- 0.16% de oxígeno molecular.
- 0.06% de monóxido de carbono.
El nitrógeno y el argón se comportaron exactamente como se esperaba. Sin embargo, el oxigeno aumentó durante la primavera y el verano hasta en un 30%, pero después volvió a caer a los niveles normales durante el otoño.
No hay un proceso conocido que pueda producir este resultado.
“Estamos luchando por explicar esto”, dijo la científica planetaria Melissa Trainer del Centro de Vuelo Espacial Goddard de la NASA. “El hecho de que el comportamiento del oxígeno no sea perfectamente repetible cada estación nos hace pensar que no es un problema que tenga que ver con la dinámica atmosférica. Tiene que ser una fuente química que aún no podemos entender”.
Existe una pista sobre el comportamiento inexplicable del oxígeno en Marte.
El metano también se eleva drásticamente durante los meses de verano de Marte, aumentando hasta en un 60%. A veces, los niveles de metano y oxígeno incluso parecen aumentar en dúo. Por lo que, es muy probable que lo que sea que cause las fluctuaciones de metano también esté causando las fluctuaciones de oxígeno.
“Todavía no hemos podido encontrar un proceso que produzca la cantidad de oxígeno que necesitamos”, dijo el astrónomo Tim McConnochie de la Universidad de Maryland.
“Pero tenemos la teoría que tiene que haber algo en la superficie del suelo que cambie estacionalmente porque no hay suficientes átomos de oxígeno disponibles en la atmósfera para crear el comportamiento que vemos”, explicó el experto.